“Todo lo que creías saber sobre la empresa está a punto de cambiar.”
El capítulo 366 de Sueños de Libertad inicia con una inquietud palpable. En la casa de los Reina, Andrés está claramente perturbado. María, como siempre, no se queda atrás en sus sospechas y preguntas. Mientras ambos se preparan para dormir, ella lo observa con atención y le pregunta sobre el origen de sus preocupaciones. Andrés, con la incertidumbre marcando su rostro, le revela que algo no anda bien en el laboratorio. María, astuta como siempre, menciona la llegada de la nueva asistente de Luis y cómo eso podría estar relacionado con los problemas actuales. Pero cuando Andrés intenta llevar la conversación hacia un terreno más personal, cuestionando la información de María sobre los acontecimientos en la fábrica, la respuesta de ella es directa: “Escucho más de lo que crees”. La tensión entre ellos crece, y es evidente que las relaciones dentro de la familia están al borde del estallido.
Pero la verdadera bomba estalla en el terreno de los negocios. Marta, siempre calculadora, está preocupada por la última decisión de don Pedro: ceder el 5% de los beneficios a los perfumistas. Mientras revisa las cuentas, se da cuenta del posible daño que esta decisión podría causar. Pelayo, su esposo, también comparte sus temores. “Es un error grave”, afirma con rotundidad. A pesar del amor que los trabajadores sienten por don Pedro, Marta sabe que este tipo de medidas es peligrosa. Además, los perfumistas ya reciben un salario justo por su trabajo, por lo que esta nueva medida podría ser innecesaria y, lo que es peor, perjudicial.
Marta sabe que este tema no puede quedarse sin resolver, y a pesar de la posibilidad de conflictos familiares, decide hablar con Luis. Sin embargo, debido a la compleja situación, Pelayo ofrece su ayuda, sugiriendo que él podría abordar el tema sin que se perciba como una imposición. La situación es delicada, y el futuro de la empresa podría depender de cómo se maneje este conflicto.
En otro rincón de la historia, las tensiones personales no se quedan atrás. Luz, con su afán por ver todo claro, habla con Begoña sobre su relación con Gabriel. La conversación revela que, aunque Begoña intenta convencerse de que todo va bien, aún hay dudas y temores. La relación con Gabriel se está moviendo más rápido de lo que ella esperaba, y el hecho de que él sea ahora parte de la familia complica aún más las cosas. Begoña se siente presionada, como si todos a su alrededor estuvieran empujándola a una decisión que ella no está segura de querer tomar. Luz, con su sabiduría, la anima a confiar en sí misma, pero la duda sigue ahí, creciendo como una sombra.
Mientras todo esto ocurre, Andrés está decidido a descubrir la verdad detrás de los problemas en la empresa. Su acusación sobre Gabriel como el posible traidor que robó la fórmula del perfume de Cobeaga es grave, pero Andrés está convencido de que sus sospechas son correctas. Después de una conversación con Cristina, la ayudante de Luis, Andrés empieza a juntar las piezas del rompecabezas. Sin embargo, Marta no está tan segura de que Gabriel sea el culpable y le recuerda a Andrés que sus sentimientos personales podrían nublar su juicio. A pesar de sus dudas, Andrés sigue adelante con su plan, decidido a conseguir pruebas que demuestren que Gabriel es el traidor.
Con cada paso, la tensión crece, y las decisiones que toman los personajes podrían cambiar el curso de sus vidas para siempre. ¿Podrá Andrés descubrir la verdad? ¿O la familia se verá arrastrada por una tormenta de conflictos y traiciones?
¿Qué opinas de la decisión de don Pedro? ¿Crees que la familia podrá superar estas tensiones?