En la semana del 26 al 30 de mayo en La Promesa, la tensión y el misterio alcanzan niveles altísimos. Curro se convierte en el gran protagonista al embarcarse en una investigación que lo lleva a descubrir una impactante verdad: quién está detrás del asesinato de Jana. A lo largo de estos episodios, los secretos, las traiciones y las alianzas ocultas salen a la luz y transforman para siempre la vida en el palacio de Luján.

Lunes 26 de mayo:
Todo comienza cuando Curro descubre que Jacobo, el prometido de Martina, es cliente frecuente de la joyería Yob, un lugar que ha estado relacionado con varios asuntos turbios. Esta revelación despierta sus sospechas. ¿Qué oculta realmente Jacobo? Curro no puede dejar pasar la coincidencia, especialmente al recordar las extrañas circunstancias que rodearon la muerte de Jana. Empieza entonces a atar cabos y plantea la posibilidad de que Jacobo tuviera un motivo para querer deshacerse de ella. Al compartir su hipótesis con Pía, encuentra una mezcla de escepticismo y preocupación.

Simultáneamente, Lope le entrega a Vera una pulsera de esmeraldas que fue hallada precisamente en la joyería. La joven, lejos de sentirse halagada, empieza a sospechar que su amigo podría estar involucrado en actividades ilegales. Por otro lado, Lisandro no deja de menospreciar a Curro, atacándolo con comentarios hirientes, aunque el joven mantiene la compostura, alimentando su rabia en silencio.

Mientras tanto, Adriano logra identificar al duque como un socio de negocios del Conde de Monteverde, lo que da pie a que Catalina lo anime a reunir pruebas para chantajear a Lisandro. En paralelo, Manuel, llamado a declarar sobre el caso de Toño, decide confiar la investigación al sargento Burdina. Leocadia, con sus propias agendas, trata de manipular a Eugenia con una falsa compasión y le insinúa tener información sobre su hermana Cruz. Aprovechando ese desequilibrio, Lorenzo aumenta la dosis de láudano en el tratamiento de Eugenia.

En otro rincón del palacio, María Fernández encuentra una carta de amonestación dirigida al padre Samuel por parte del obispado, algo que usará a su favor. Finalmente, la relación entre Emilia y Rómulo parece renacer poco a poco.

Martes 27 de mayo:
Leocadia da un paso más allá y diseña un plan sumamente arriesgado para afianzar su alianza con el duque de Carvajal: propone usar a los bebés de Catalina y Adriano como símbolo de unión familiar, una idea tan inquietante como perturbadora. Esta propuesta deja entrever que hay motivos ocultos mucho más oscuros.

Por su parte, Curro profundiza su investigación sobre Jacobo y descubre contradicciones en su relación con Esteban Monteclaro. Confundido y en busca de respuestas, acude a Manuel. Juntos logran descubrir un lazo familiar oculto entre Jacobo y Monteclaro que lo deja completamente en shock. Lo que parecía ser solo una sospecha se convierte en una trama más oscura de lo imaginado.

Al mismo tiempo, Eugenia empieza a comportarse de forma errática debido a los efectos del láudano que Leocadia y Lorenzo le están suministrando. Saben que si logran desestabilizarla mentalmente, perderá toda credibilidad ante los demás. Jacobo también aprovecha el caos para sembrar dudas en Martina sobre su compromiso, intentando manipular sus emociones.

Mientras tanto, Ricardo continúa abatido por la ausencia de su hijo Santos. En una conversación íntima con Pía, el mayordomo se desahoga, revelando el dolor que aún arrastra por la distancia con su hijo y su deseo de reconciliación.

Miércoles 28 de mayo:
Curro cree haber dado con el culpable del asesinato de Jana. Tras atar todas las pistas, decide contarle a Pía quién, según él, fue el autor del crimen: alguien más cercano de lo que todos pensaban. Pero aún queda la duda: ¿ha acertado o ha sido engañado por una falsa pista?

Mientras tanto, Eugenia, presa del deterioro mental provocado por sus enemigos, reacciona violentamente contra el Capitán de la Mata, causando un escándalo entre los sirvientes. Teresa corre a informar a Petra y Rómulo, quienes se muestran alarmados. Lo que parecía una mejoría de Eugenia quizá no fue más que una ilusión.

Leocadia, como si nada hubiera pasado, propone a Eugenia un paseo por los jardines, mientras María Fernández observa con creciente preocupación el estado de la hermana de Cruz. Además, la carta del obispado sobre el padre Samuel plantea la posibilidad de una severa sanción eclesiástica. María sospecha que Petra fue quien denunció al sacerdote y no duda en acusarla.

Por otro lado, la relación entre Rómulo y Emilia parece consolidarse. Las viejas heridas comienzan a sanar y entre ellos renace la complicidad. Pero en medio de todo, Vera descubre que la famosa pulsera de esmeralda no es auténtica. Esta revelación puede ser la clave que desenmascare el negocio sucio que esconde la joyería Yob.

Adriano también escucha una conversación comprometedora entre Petra y las cocineras, en la que se mencionan su nombre y el del duque. La tensión crece hasta que Lisandro lo enfrenta directamente. Y como si fuera poco, el sargento Burdina vuelve con un bombazo: Toño inventó todo el caso del robo. No solo no hubo delito, sino que él mismo fabricó la historia.

Jueves 29 de mayo:
Alonso, cansado de los enfrentamientos, especialmente entre Adriano y Lisandro, impone su autoridad con una propuesta que nadie esperaba. Obliga a Catalina y Adriano a aceptar la idea de Leocadia: que Lisandro sea el padrino de los bebés Rafaela y Andrés. Esto no es solo un gesto simbólico, sino una jugada estratégica para reforzar los lazos entre los Luján y el duque.

Mientras tanto, Manuel digiere la dura verdad: Toño mintió. En vez de castigarlo directamente, decide confrontarlo con sabiduría, esperando que confiese por su propia voluntad. A la par, Curro y Lope descubren que las joyas que creían auténticas también eran falsas, lo que los deja sin pista clara en su investigación.

Viernes 30 de mayo (avance especial):
Todo apunta a que Curro ha acertado en su investigación. Después de días de dudas, hallazgos y secretos, logra reunir pruebas contundentes que señalan a Jacobo como el verdadero responsable del asesinato de Jana. Su obsesión con Martina, su conexión con Monteclaro, y sus constantes mentiras, lo delatan. La verdad golpea fuerte y sacude a toda La Promesa.

Sin embargo, este descubrimiento no pone fin a los conflictos. Leocadia aún guarda varios ases bajo la manga, Eugenia sigue en el borde de la locura, y la familia Luján deberá decidir si enfrentan juntos la verdad… o permiten que la oscuridad siga envolviéndolos.

Conclusión del spoiler:
Esta semana en La Promesa, Curro se convierte en un detective implacable que finalmente logra descubrir la verdad detrás del asesinato de Jana. Pero con cada respuesta aparecen nuevas preguntas. Las mentiras, traiciones y alianzas se entrelazan en una red cada vez más peligrosa. Y mientras algunos luchan por justicia, otros están dispuestos a todo con tal de ocultar la verdad.