Damián amenaza a María para que deje de influenciar a Andrés, el jueves en ‘Sueños de libertad’.
Mientras tanto, Digna revela a Irene y Pedro la información que acaba de descubrir sobre Gabriel, lo que confirma que los secretos en la familia De la Reina están lejos de haberse agotado.
Irene, aprovechando la conversación, deja caer que Damián no es el único que ha ocultado capítulos de su pasado. Su distanciamiento con Pedro empieza a notarse… y Digna capta la tensión.
Finalmente, Irene se sincera con Digna y le cuenta la traición que ha sufrido por parte de su hermano. El descubrimiento ha abierto una brecha profunda entre ambos.

Por su parte, Joaquín sigue convencido de que alguien lo drogó la noche en que perdió la dirección de la fábrica. Gema se involucra en su búsqueda de la verdad y planea acercarse a Irene para sacarle información.
Andrés intenta reincorporarse a su trabajo, pero María le hace sentir culpable por dejarla sola en casa. Movida por la manipulación, logra que él vuelva con ella, una vez más.
Luz y Begoña retoman su complicidad. La doctora le confiesa su nerviosismo por el examen médico que se avecina, mientras Begoña se muestra desolada por la ruptura con Andrés. Solo Julia consigue sostenerla.
Gema, queriendo evitarle un disgusto a Joaquín, le asegura que será Luz quien la acompañe al cardiólogo. Pero cuando se lo propone, la médica se muestra reticente.
Marta le da una noticia agridulce a Luis: Cobeaga ha elegido a Perfumerías De la Reina para su nuevo perfume… pero quiere estar involucrado en cada paso del proceso.

El diseñador no tarda en llegar a la Colonia, donde se cruza con Pelayo. Entre ambos surge una conexión instantánea que no pasa desapercibida.
Digna, en una posición delicada, acaba justificando las decisiones de Pedro sobre la separación entre Irene y Cristina. Ahora, ambos se preparan para responder a la ofensiva de Damián.
Marta y Pelayo se enfrentan a Gabriel, pero este sabe cómo ganarse a su prima… aunque no consigue lo mismo con Pelayo, que prefiere disimular su desconfianza.
Tras el desplante de Andrés en su primer día de regreso al trabajo, Damián decide tomar cartas en el asunto. Visita a María y, con una sonrisa helada, le lanza una amenaza velada: si sigue impidiendo el futuro de su hijo, acabará ingresada en una residencia de lujo.