Te recordamos que, en el capítulo anterior de “Sueños de libertad”, emitido el martes 22 de julio, Begoña le recriminó a Andrés su actitud con Gabriel, Luis aconsejó a Cristina que escuchase a su madre, Gabriel proporcionó una solución al problema del lirio, Julia se disculpó con Teo, Andrés se enfrentó a don Pedro por haberle negado la ayuda a Diosdado en el pasado, Luz tranquilizó a su sobrino con respecto a la enfermedad de Gema, Cristina tomó la decisión de dejar su trabajo y Gabriel pilló a María moviendo un pie.

Si quieres descubrir todo lo que ocurrirá en el siguiente episodio, te lo contamos en el avance exclusivo que te ofrecemos en vemosTV del capítulo 356, que se emitirá el miércoles 23 de julio a las 15:45 horas en Antena 3.

Avance de lo que pasará el miércoles 23 de julio en el capítulo 356 de “Sueños de libertad”

El capítulo arranca con un gesto de buena voluntad por parte de Andrés. Consciente del daño ocasionado, le pide perdón a Begoña por haber sido tan intransigente con el tema de Diosdado.

En paralelo, Cristina acepta reunirse con doña Ana, su madre adoptiva, para escuchar sus explicaciones. Tras el intenso encuentro, la joven decide perdonarla y volver a Madrid con ella. Sin embargo, antes quiere dejar terminado el trabajo del perfume del aniversario.

En la tienda, Fina recibe la visita de Pelayo. El político todavía sigue molesto después de que Marta se haya echado atrás en su plan de ser padres juntos y culpa a la dependienta de ello. Ella trata de excusarse, pero solo sirve para seguir discutiendo sobre el mismo tema.

Mientras tanto, Gabriel y María regresan a casa tras realizar una visita médica a escondidas. Aunque el especialista no fue capaz de dar un diagnóstico definitivo, la mejoría es evidente, lo que le da esperanzas a María para creer en una completa recuperación. Al enterarse de la salida, Andrés interroga a su mujer intrigado por su repentina cercanía con Gabriel.

Otro al que no le hace mucha gracia esta amistad es a Damián. En cuanto puede, el patriarca advierte a Gabriel sobre los peligros de acercarse demasiado a María. Gabriel, por su parte, trata de justificarse diciendo que ganarse a María forma parte de su estrategia para proteger los bienes de la empresa.

Por otro lado, Gaspar y Manuela observan con preocupación el estado de ánimo de Raúl, quien tras la ruptura con María se muestra abatido y solitario. Ambos intentan reconfortarlo jugando al dominó.

En otro frente, doña Ana acude a secretaría para recriminarle a Irene que le haya contado la verdad a Cristina. La hermana de don Pedro trata de excusarse como puede, pero doña Ana no atiende a razones. Está furiosa y le pide que se aleje de su hija para siempre.

Entretanto, Andrés decide compartir con Marta sus sospechas sobre Gabriel. Le confiesa que no confía en su primo y que está convencido de que sus intenciones no son tan nobles como aparenta. Marta, por su parte, intenta restarles importancia a las ideas de su hermano. Es ahí cuando Andrés decide ponerse en contacto con el proveedor de lirio recomendado por Gabriel, una decisión que, sin saberlo, desencadenará nuevos problemas.

En la colonia, Cristina les cuenta a sus compañeras de cuarto sus planes de marcharse. Claudia, consciente de los verdaderos motivos, se ve en la obligación de convencerla para que no se vaya. Sin embargo, la química no da su brazo a torcer, está decidida.

Para cerrar el episodio del miércoles, Gabriel confronta a Andrés por haber actuado a sus espaldas con los proveedores, pero este último no se achanta. En lugar de disculparse, lo acusa abiertamente de ser el responsable del problema en la fórmula del perfume. Gabriel ya no tiene dudas de que Andrés le pisa los talones…