“Una fiebre mortal. Una mentira profunda. Y un traidor que nadie vio venir.”
La Promesa está alcanzando nuevas alturas de tensión y drama. En el capítulo 638, Catalina se enfrenta al mayor desafío de su vida cuando descubre la verdad detrás de la enfermedad que ha tenido a Rafaela al borde de la muerte. Lo que parecía una simple fiebre infantil, una enfermedad que todos los médicos descartaban como común, se convierte en un envenenamiento deliberado, diseñado para acabar con la pequeña heredera de la familia.
Mientras Rafaela lucha por su vida, Catalina se niega a dejar su lado, su corazón roto por el sufrimiento de su hija. En sus brazos, la niña ya no responde a los remedios convencionales. La fiebre se ha apoderado de su cuerpo, y su vida está en grave peligro. En su desesperación, Alonso se ve obligado a llamar al mejor doctor de toda España, el Dr. Eudoro, conocido por su capacidad infalible de diagnóstico, un hombre cuya fama le precede en la alta sociedad.
El diagnóstico llega a ser aún más aterrador de lo que los padres imaginaban. Rafaela no solo está enferma por una fiebre común: algo mucho más siniestro está ocurriendo. El Dr. Eudoro confirma que Rafaela ha sido envenenada. Su cuerpo está respondiendo a un veneno que la ataca lentamente, y lo más escalofriante es que todo apunta a un sabotaje interno. La estufa de la habitación de la niña fue manipulada para enfriar el ambiente por las noches, lo que debilitó su sistema hasta casi destruirla.
Es entonces cuando Catalina y la Guardia Civil deciden actuar. Confiando en sus instintos, montan una trampa que revela la identidad del culpable. Lorenzo es el principal sospechoso, pero la verdad es aún más compleja de lo que imaginaban. Aunque Lorenzo estaba actuando bajo órdenes, hay algo mucho más grande en juego. Leocadia, la mujer que todos creían aliada, tiene un papel clave en este plan siniestro. ¿Qué busca realmente Leocadia al destruir la vida de Catalina y su familia? La respuesta podría ser más oscura y peligrosa de lo que se pensaba: el control total sobre la herencia y el futuro de los hijos de Catalina.
El aire en el palacio de La Promesa se vuelve irrespirable a medida que las piezas del rompecabezas empiezan a encajar. Nadie está a salvo. Las traiciones se revelan, y las alianzas se fracturan. Mientras tanto, Alonso, quien siempre había considerado a Leocadia una aliada confiable, comienza a ver su manipulación en su propio rostro. Sin embargo, su obsesión por proteger a su hija lo lleva a una ceguera temporal, incapaz de ver las señales claras de traición que se despliegan frente a él.
Por otro lado, Curro sigue tras la pista de Lorenzo, convencido de que su hermana fue asesinada por él. En cuanto descubre la conexión entre Leocadia y Lorenzo, su ira se desborda, y jura que hará justicia por su cuenta. Mientras tanto, Cristóbal continúa operando en las sombras, con sus propios planes secretos. Todos los hilos de esta intrincada historia de traición, amor y venganza se están cruzando, y nadie quedará indemne.
La tensión llega a su clímax cuando Catalina finalmente se enfrenta al traidor, exigiendo respuestas y justicia. Con una mirada decidida, y las manos temblorosas de rabia y dolor, Catalina tiene que tomar una decisión que podría destruir a su familia, pero también salvarla. ¿Conseguirá Catalina hacer justicia para Rafaela? ¿O caerá en la trampa de Leocadia y Lorenzo?
Con cada verdad que sale a la luz, la familia de La Promesa se ve más y más fracturada. Los secretos ocultos y las manipulaciones al más alto nivel pondrán a todos a prueba, pero la lealtad, el amor y la venganza nunca serán los mismos después de este capítulo.
¿Sobrevivirá Rafaela a este intento de asesinato? Las sombras de Leocadia se alzan aún más altas, y Alonso podría ser el siguiente objetivo en esta red de traición.